sábado, 2 de mayo de 2015

Enfocando nuestro talento con #Mindfulness


Para dirigir la propia vida,  darle un sentido, un propósito, tenemos la oportunidad de hacerlo  cada día, cada instante, en el momento que decidimos amar lo que somos,  lo que hacemos utilizando  nuestro potencial creativo.

El  potencial creativo,  son aquellas cualidades que son propias de la persona, con las que somos felices y le damos al mundo razones de felicidad, es todo aquello que haces  natural y espontáneamente,  es  lo que te ilumina los ojos de solo pensarlo y al hacerlo el tiempo no transcurre, no pasa, al elegir desarrollarlo,  la vida se llena, se nutre, se desarrolla.

Al desarrollar el  potencial creativo, con amor y pasión, tenemos la oportunidad de vivir en el momento presente  con intensidad y felicidad, presencia total, y a su vez  le damos al mundo razones de felicidad, como decía Confucio, si algo te encanta, si algo te apasiona y encima se te da bien nunca vuelves a trabajar, porque vives la vida que te corresponde vivir. Te conviertes en tu yo más auténtico.

Según Ken Robinson,  define  los dones en la  fuerza y la pasión producto de  la creatividad, que no es más que poner a trabajar la imaginación que  todos los humanos tenemos  y es  el elemento que  le da propósito a la vida humana.

En este contexto, considero importante preguntarnos a nosotros mismos, que vida estoy viviendo y cual deseo vivir, si estoy feliz con mi experiencia actual o lo estoy posponiendo, si mi potencial creativo y mi elemento lo estoy desarrollando o lo he dejado olvidado, porque es primordial incluir en nuestra vida la  felicidad y  ser lo más autentico que podamos en este momento y no dejarlo para después, cuando notemos que la muerte está cerca ,  para que pensemos en que decisiones, acciones, oportunidades he tomado, cuales he dejado pasar; cuales sueños convertí en realidad y cuales postergue, porque tal  vez mañana, tendrías  más tiempo,  más ganas, mas inspiración, olvidando que es el ahora, este momento es lo único real y verdadero para empezar.

La práctica de mindfulness es una opción que nos permite dirigir nuestro elemento y potencial  en la dirección que elegimos, porque nos permite  desarrollar y fortalecer la concentración y el  foco para emprender con todo  nuestro potencial, a través de ejercicios basados   en la atención a la respiración, al cuerpo y a los sentidos, acercándonos a  nosotros mismos y a la posibilidad de elegir desde la congruencia que requerimos.


Miriam Guzman M